Excelente atención y la carta pequeña pero precisa en sus comidas. Al frente se encuentra la estación el Melocotón, por si la quieren pasar a ver... Google Estación el Melocotón
Llegamos por recomendación de zomato. Restaurante con una pequeña carta, pero precisa. Ya que cuenta con comida chilena y platos muy bien preparados. Un agradable lugar para ir el fin de semana y escaparse del aire de santiago.
Fui un día domingo tipo3 de la tarde , el lugar es amplio con una decoración rústica y tiene varias salamandras por lo que pese al frío que hacía afuera adentro estaba calentito.
Nosotros pedimos un cordero montañés que venía en un plato de greda y acompañado de un puré picante ( el puré picante no está en el menú pero se puede pedir ) . Muy bueno y totalmente recomendable , es la especialidad del restaurant
También pedimos una plateada con puré picante , cuando llegó venía con mucha grasa por lo que le dije al mesero y no tuvieron ningún problema en cambiarla e incluso me regalaron un postre 😬. La carne súper suave y blanda el puré estaba buenísimo , también un plato recomendable , el caldo d ella carne viene en un mini pote aparte y quizás es muy poco,lo único que le podría criticar .
Mientras esperábamos los platos nos llevaron pan con mantequilla y pebre y unas mini empanadas de pino . Si bien tuvimos que esperar harto rato los platos la espera vale la pena.
Me encantó. Una casona que exhibe recortes de diario antiguos y ambienta con excelente música. Tiene salamandras por todas partes que mantienen el lugar a una agradable temperatura. La atención muy amigable y rápida. Te hacen sentir en casa.
Comimos unos sándwiches maravillosos, contundentes y bien presentados. Les recomiendo mucho el jugo de berries, es muy rico!
De postre pedimos un "crème brûlée", pero era un flan, con la famosa capa de azúcar quemada que caracteriza al crème brûlée. Evidentemente no era lo que prometía, pero como flan, estaba bueno.
Toda la comida se nota muy casera, pero de presentación y calidad sumamente cuidada.
Sí o sí, volveré.
Christofer Belda Carrasco
+5
Fui a este restaurant un día domingo, como a las 16:00. Al entrar llama la atención las chimeneas y salamandras que tienen en todo el local, lo cual lo mantienen a una agradable temperatura que se agradece en invierno. En cuanto a los platos son bastante abundantes lo que se condice con el precio y en sabor realmente buenos, se nota que los preparan en el momento. Otro detalle muy bueno, es que antes de traer los platos ponen pan amasado y unas empanaditas de pino. Finalmente los postres son muy buenos y la atención excelente.
El sandwich de mechada el montañés es espectacular, la cantidad precisa para quedar satisfecho y con ganas de volver a probar otro plato.
La atención es cordial y rapida. Es una casona decorada con elementos historicos, muy bien distribuidos. Ademas tiene estacionamiento interior.
Los precios son acorde a la porcion del plato. 100% recomendable
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