Fui al Ambrosía con mis padres para celebrar la defensa de mi título. Y si bien el local ese día estaba lleno de turistas, creo que no escuché a ningún otro chileno, creo que es una parads obligatoria (si el bolsillo les da) para conocer la maravillosa carta y ecperiencia culinaria que creó Carolina Bazán.
Todo muy rico, en su punto y con los tamos justos.
Para los que son diente grande, tengan en cuenta que los platos no son enormes y a la cundidora. Son bastante recatados en tamaño, lo que ayuda al disfute de 3 tiempos.
Esa vez pedimos de entrada un foie gras con gelatina de espumante y brittle de caramelo y almendras que fue de otro planeta.
Muy buena cocteleria, grato ambiente y buena atención a la mesa. Eso sí, los precios son bastante elevados.
Sebastian Rodriguez Veroiza
+4
Lindo restaurant ubicado en la zona oriente de la capital. Es una gran casa adaptada con hartos jardines y mesas tanto afuera como adentro. Buen ambiente.
Fuimos a celebrar un aniversario de matrimonio, con altas expectativas. Tiene una carta acotada, que va variando según la comida de la estación.
Pedimos un plato de pasta y una entraña con ensalada. Ambos platos correctos, bien servidos, pero esperábamos más, sobre todo por el alto valor ($15.000 aprox). Luego el postre y por cortesía de la casa por la ocasión especial nos sirvieron 1 de regalo. Buena iniciativa que nos invita a volver.
En definitiva, buen ambiente, buenos platos, buena atención. Pero no lo mejor que he probado.
Carta reducida, buena cocina, rico, pero no lo encontré espectacular, dado sus precios pensé quedaría Wow pero no fue así, pienso es bien caro para lo que es. Me encanta la onda de su dueña, pero no comparto este concepto de ofrecer cocina a tan alto precio.
Tenía muchas ganas de conocer este lugar y fue por lejos una experiencia muy interesante.
pedimos de entrada un pulpo de Juan Fernández que estaba maravilloso!!!! El mejor pulpo que he comido en mi vida. De fondo me pedí una porción de pejerrey frito que estaba servido con cebolla en escabeche y estaba realmente sabroso!
De postre compartimos una porción de tarta de nuez con helado de vainilla y otra profiteroles de chocolate con helado de lucuma.
Muuuuy muy rico
Marisha Gigoux Alarcon
+4.5
Tuvimos una buena experiencia en general, la atención es muy buena, los cócteles, en especial la caipiroska de maracuyá, una maravilla. Las entradas se pueden pedir en modo pequeño y de esa manera poder probar más de una, me gustó mucho la croqueta. De fondo pedí el Wagyu pero personalmente odio la consistencia de la grasa y el corte venia con una pequeña capa de ésta en la parte superior. El postre muy rico, creo que me hubiese pasado de las entradas al postre y no me pierdo nada. En general muy bueno pero no sé si vale el precio que cobran...por último habían mesas con unas sillas de metal que nunca entendí.
Una experiencia maravillosa.
Con una carta acotada, pero no menos llamativa en su simplicidad, nos decidimos por un ceviche para comenzar, con un pescado fresco y toques cítricos, simplemente exquisito. De fondo yo pedí una pasta fresca con un huevo mochado y queso parmesano, el spaguetthi al dente, acompañado por un huevo perfectamente, que se complementaba perfectamente con los champiñones y el queso parmesano. Mi acompañante pidió un congrio a la plancha con un rissotto de mote, simplemente delicioso. Probamos la degustación de postres, donde destacó y por lo mismo recomiendo el Ganache de chocolate blanco, cuya cremosidad se combina perfectamente con la crocancia de la galleta y el toque ácido de la salsa de maracuyá.
No deje de probarlo, no se arrepentirá. Carolina Bazán sigue deleitándonos!
Comida premium, casa exquisita al igual que los cubiertos, las mesas, la terraza, etc. Sillas comodisimas y comida para todas las dietas. Servicio correcto y educado.
Por donde comenzar.... El lugar es precioso, la terraza tiene un jardín muy bien cuidado. El interior iluminado excelentemente, solo luces suaves e indirectas, La decoración y los colores interiores son bellos pero sobrios, como para no entretenerse tanto en eso y concentrarse más en la persona que está en frente. La comida, simplemente sublime. Con mi esposa quedamos encantados de los sabores delicados de los platos. Ella comió corvina con puré de alcachofas. Yo un pecho de cerdo con puré de camote y manzana. Todo exquisito. El vino lo pedimos en copa por la diferencia de los platos. Excelente selección. La atención un 7, el mozo, la anfitriona todos muy simpaticos y atentos. Mis sinceras felicitaciones a todo el equipo que conforma este restaurante.
Edit: Los postres!!!! Lo olvidaba. Si tu pareja dice que ha comido mucho y que el postre sería gula, simplemente ignórala y pide la degustación de 3 postres.
Estaba dentro de mis pendientes y me arrepiento de no haber ido antes. Simplemente exquisito, con una atención de calidad y un ambiente entretenido, bien decorado y con buena música para disfrutar los ricos platos de la pequeña y cambiante carta. Buenísimo!!
Rodrigo Barrales Morales
+4.5
Excelente restaurant, un poco escondido pero muy ameno... especial para ir en familia o en pareja... de preferencia en la noche que tiene una linda vista, y se pide a la carta... ya que en el día tienen un menú ejecutivo un poco acotado... sin embargo es imperdible el asado de tira y el medallón de cordero con puré de arvejas... exquisito...
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