Muy buena la comida, la carne estaba muy bien. La atención un poco lenta y el lugar bastante espacioso
Lugar muy espacioso, con iluminasion tenue, de rápida atención y atento servicio, carne según el gusto de cada cual, sus papas fritas con verde muy ricas y frescas, no es muy económico, pero tiene buen servicio y todo fue fresco y rico, recomendado sin duda para ir en grupo de trabajos a celebrar alguna ocasión especial
Pau Alejandra Hoppin B
+3.5
El lugar es agradable , los meseros cordiales y atentos , la cantidad de comida es muy poca por el costo de los platos que es bastante elevada si van dos , nos tocó que el corte de carne venían crudos y no a punto , y un pedazo con nervio , podrían mejorar en la abundancia de los platos , y la calidad de las carnes 👌
Gostei muito e recomendo!
Camareros simpáticos, comida muito boa, ótima sobremesa, ambiente agradável e preço justo.
Fácil localização, atendimento rápido durante a semana.
Claramente para ir acompañado con un número importante de personas para no perderte en el tremendo espacio que te ofrece este restaurant. Parrillada de filete, lejos lo mejor; recomendable sobre todas las demás parrilladas.
Lo he visitado en tres ocasiones, y solo una fue de mi gusto, en la que pedimos parrillada solo de vacuno, muy sabrosa, carne jugosa en el punto adecuado y de acompañamiento papas fritas, normales. Es malo ir tarde, ya que la presion por cerrar la cocina y el cansancio de los garzones se nota, el pan contado segun los comensales.
De las veces anteriores recuerdo porciones pequeñas de acompañamientos y tragos un poco tibio, ademas de parrillada un poco seca principalmente al contemplar interiores.
Todo muy rico y bien atendido, la carne a la parrilla exquisita y la atención muy buena. Tienen muy buenos vinos y una carta amplia. Los postres riquísimos, no hay donde perderse. No es barato, pero vale la pena, no le pongo el 5 porque tiene problemas de estacionamiento, y eso es molesto a la hora de pasarlo bien allí.
Se encuentra algo escondido en calle Libertad, cuenta con estacionamientos dentro del local y aparentemente otros media cuadra hacia la Alameda.
Lo conocí al ser invitado a una comida laboral, y la verdad me sorprendió gratamente. Nuestro menú aquel día fue: empanaditas, parrillada, ensaladas, papas fritas, postre y aperitivo a elección, todo esto acompañado por botellas de vino para compartir. De la parrillada, los cortes de carne fueron servidos a punto, jugosos y sabrosos. Quizás en lo único que uno puede reparar es en los tiempos de atención y en el espacio reducido entre las sillas para las mesas.
Espacialmente, se logran ver dos salones, uno relativamente pequeño, con unas pocas mesas, y otro mucho más grande, con las mesas reservadas para comidas masivas como sucedió en mi visita a este lugar. En una de sus orillas, pueden verse las parrillas y la preparación de la carne, que atrae las miradas de los comensales.
Por último, decir que el servicio fue amable, y pudimos presenciar la forma en que animan al público si alguno de los asistentes está de cumpleaños.
Buena experiencia, aunque hasta ahora, no sería mi primera elección para ir a comer carne.
Todo un clásico. Aun cuando su ambientación es muy tradicional, esta es una de las mejores parrilladas en Santiago: es abundante (en los platos y en los tragos), es barato y de muy buena calidad. Siempre he ido con amigos y nunca somos capaces de comernos todo.
No falla, entrega lo que esperas de un lugar de parrilladas, buena carne, rápida atención y el mozo "no te deja tranquilo" rellenado la panera (una forma de decir, te atienden muy bien)
Él sour es rico, no el mejor, pero cumple. Las ensaladas siempre bien trabajadas y frescas ayudan a consumir los sendos pedazos de carne que ofrecen.
La estrella del lugar a mi gusto es la parrillada de filete premium junto con la precio medio.
Bien el chilenazo!
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