Doria Cecilia Gonzalez
+5
Me encanto este café por todo lo que ofrece, pero sobre todo, la amabilidad de Alejandro y su familia. Se los recomiendo excelente desayunos y cenas.
Dentro del barrio, lejos lo mejor, atención rápida y muy preocupados de si eres atendidos o tienes cosas en la mesa para retirar, el precio por menú es justo, la comida deliciosa y siendo pequeño está bien diseñado, acogedor y además puedes pagar c tarjetas.. genial chics!!
Ordene la torta de chocolate y estaba fresquita, para nada empalagosa. Lo único encontre no tan positivo fue la atención debido a la disposición de la persona que nos atendió.
He ido a almorzar varias veces acá y es muy bueno. La comida es bien preparada, rica y los platos son gigantes. Recomiendo la lasaña con boloñesa. También la gente dice que la pasta al pesto es buenísima pero a mi no me gusta el pesto jaja. Lo mejor es el precio, almuerzas solo por 3200!!! E incluye: ensalada o sopa, plato de fondo, jugo y postre.
Fui con un indio sik y otro compañero buscando algo sin carne. Había pasta. Local pequeño pero con mesas afuera. Hay que llegar antes para no esperar. La comida buena buena en calidad precio cantidad. La atención muy buena. Jugos naturales y el del menú riko. Al indio le gustó y a nosotros tambien. Volvere.
Me acuerdo perfecto del primer dia que visitamos esta cafetería con dos amigas más.
16 de septiembre el dia del terremoto en el norte!! Pucha que la sufrimos, 3 pollitas asustadas, se caian maseteros del edificio del frente.. en fin terrible jajaja
En cuanto al local es chiquito, pero acogedor! Atendido por los dueños que son extranjeros si no me equivoco. El jugo que pedimos estaba muy rico y por culpa del terremoto non pudimos seguir probando mas cosillas, pero lo recomiendo igual!
Rinconcito escondido del barrio París - Londres, atendido por sus dueños, donde se puede disfrutar tranquilamente de un cafecito y un pastel a media tarde, es un local súper pequeño pero con muy linda decoración, con un par de mesitas afuera buen agradables. La atención súper buena, simpatiquísimo el gringo que prepara el café con una sonrisa, la carta es acotada, generalmente limitada a lo que queda en el momento en la vitrina, pero rico. Un alto en el ajetreo de la cuidad :)
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