Excelente atención, pedí la parrillada especial para compartir con mi familia. La carne estaba en su punto y las ensaladas frescas y sabrosas. El mozo 44 (Ricardo) fue muy atento, nada malo que decir.
Como siempre bien atendida y la comida rica, eso si esta vez la parrillada tenia mucha chuleta de cerdo en vez de carne y nunca me ha gustado el pollo
Para ir un día de semana más que el día de las carreras (el Hipódromo Chile está a una cuadra) o un fin de semana. Atención rápida y oportuna. El pan se sirve caliente y por lo visto, se prepara en el mismo local. Lo bueno es que es un local con muchas mesas que difícilmente colapsara. El local es amplio y con varios comedores, tiene bastantes estacionamientos y entradas por Altamirano y la paralela (cuyo nombre no recuerdo ahora).
Básicamente hay parrilla de pescados y carnes, junto con escalopas y cosas a la plancha. La carta no es en extremo variada y no ha tenido mucha renovación en el tiempo. Eso sí, la carne bien, no extraordinaria, pero si correcta. Recomiendo pedirla un punto menos de cómo te gusta usualmente ya que ponen bastante carbón en las parrillas que van a la mesa, lo que finaliza la cocción. Las ensaladas no son en extremo grandes, y más encima se sirven en potes pequeños, seguramente terminara un poco en la mesa. Pocos postres, lo típico de siempre. El café regular.
Otra cosa buena de este sitio es el descuento que hacen al hacerse cliente frecuente. Eso sí, exigen la tarjeta por lo que es bueno tenerla a mano.
Les vendría bien innovar. Lo siento un poco pegado en el tiempo....
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